¿Por qué escribir?

La escritura es un arte iniciada en el cuarto milenio a.C. y que, a día de hoy, se sigue practicando en los lugares mas insólitos del Planeta, aunque no todo el mundo tiene acceso a su aprendizaje. Gracias ella, podemos materializar y plasmar en una hoja de papel todo aquello que pensamos y sentimos, incluso todo aquello que queremos decir y no podemos. Es la mayor fuente de comunicación en el mundo y  gracias a internet, esta información llega en menos de .05 segundos a cualquier domicilio que disponga de una conexión.

Pero el mero hecho de escribir, al menos continuadamente, tiene efectos en el cerebro muy curiosos. Muchos terapeutas mandan a sus clientes a escribir sus problemas, hacer una lista de virtudes, hacer una carta ficticia, etc. Escribir como rutina, es un gran método contra el estrés, aumenta nuestra capacidad creativa, aumenta la actividad en nuestro cerebro (proliferación de neuronas), aumenta nuestra fluidez verbal (y escrita) y si contamos con que necesitamos dar con una palabra que no conocemos y la buscamos en el diccionario, estamos aprendiendo, nos culturizamos y por tanto: aumenta nuestra capacidad de razonamiento y, a su vez, de deducción.

Estas y otras razones son las que me han llevado a escribir, al menos, una vez en semana del tema que mas informado estoy: la Psicología. No se trata de un blog que vaya a contener una gran cantidad de contenido científico, ni textos enormes de información, tampoco una escritura regia,  pero sí curiosidades para aquellos que, como yo, les gusta este pequeño mundo de las mentes. Con ello termino mi primera intro y aporto mi pequeño grano de arena al mundo del "sharismo" (que se comentará en la siguiente entrada).